miércoles, 29 de mayo de 2013

Globos de colores

Se veía un marco grande de madera dorada y vieja y dentro estaba ella con globos de colores en la mano. No era una pintura ni una fotografía, era ella que se miraba en un espejo y se imaginaba así. Era ella siendo producto de su imaginación. En cada globo había caramelos de colores y piruletas con forma de corazón. Y en sus pies, había menos barro que el mes anterior. Como un cohete, ella lo que hacía era esperar el día de su despegue. El día en que los globos se convertirían en alas y la presión de la altura haría explotarlos para que todos los caramelos se transformaran en un aura de sueños tangibles por los que brindas con champagne.