sábado, 10 de agosto de 2013

El espejo

Lo que salía de esa guitarra que tocabas a veces era la presentación de todos los pasos que tú, a lo lejos, ibas caminando para acercarte sin saberlo. Los cielos han cambiado tantas veces como los brazos que te cobijan y todos nos vamos con el cielo que dejamos atrás. Viajamos con espejos desde lados opuestos y un día, cuando la distancia se disuelve ves tu reflejo en otro espejo y vuelves a estar en un más allá. Y un más allá es una esperanza nueva que quizás es sólo una copia actualizada de lo que ya viviste una vez, con otro espejo, en otro cielo pero en tu misma realidad.