miércoles, 12 de diciembre de 2007

De fondo, la vie en rose

Para variar hemos hecho bar y palique que tela. Últimamente estamos que nos pisamos los talones y esto hace sonreír que hasta duele. Tu me dices que ojala lo mío y yo que ojala lo tuyo aunque ambas sabemos que es un quejarse que ni viene a cuento. Pero para cuentos los que creamos nosotras que somos artistas de lo efímero, de palabras que van y que vienen y que llenan de artisteo nuestra vida. Y así es como nosotras somos felices, muy simple (y complicado a la vez). Montamos historias mentales que hacen preciosa esta vida. Son movidas que las intercambiamos en forma de sueño y de ojala fuese así pero que se podrían aplicar a la realidad. El problema es que no todo el mundo es como nosotras y cuesta encontrar a alguien para compartir este sentimiento. La verdad es que llega un momento que da igual, que cada uno es como es y que genial que sea así, sino el mundo sería mediocre y entonces el mayor de los fracasos. Nosotras seguiremos bailando y cantando La vie en rose por las calles de Barcelona, seguiremos siendo imán de detalles, seguiremos dando palabras a nuestros sueños, seguiremos comprando flores, seguiremos amando las pelis de amor y sobretodo, continuaremos con nuestro apego por seguir siendo así. Supongo que tenemos un lado un poco bohemio que nos aparta a veces de lo terrenal y la realidad nos resulta relativa. Llámanos raras, si esto es ser raro, pido que para siempre sea así. Ya hay bastante festival mundano en nuestras vidas como para tener que cargarlo absolutamente en cada momento. Y hoy la cosa ha ido así, porque últimamente yo soy tú y tú eres yo y así, vistas desde fuera nos vamos conociendo aún mejor a nosotras mismas.
Con todo esto, que bonito día el de hoy que hemos hecho planes de felicidad y supongo que por nuestra cara de ilusión hasta nos han invitado al teatro a las dos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me inspiraste, como siempre. Bohemias y artistas de lo efímero, eso es!